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lunes, 30 de noviembre de 2009

MAREA (CON TODAS LAS JOTAS Y SIN LAS X), DE JUAN RAMÓN JIMÉNEZ


Como una enorme ola retenida por la luna, mientras la vida jira fatalmente, me quedo absorto ante ti, vueltos los ojos a tu blanca maravilla celeste.
¡Parecías, desde este antro plutónico de mi alma, tan leve, tan suave, tan ofélica! Yo me creía un invencible mar. Mas tú haces retorcerse mis entrañas de líquido fuego, impasible entre las claras estrellas que te nimban.
Y mi corazón, mujer sin nombre, luna sola de mi vida, se marcha hacia ti, -¿por dónde, cómo?- inesplicablemente, involuntariamente, perdido sin remedio.


Fragmento de "Mar de vuelta", en Diario de un poeta reciencasado, Juan Ramón Jiménez, 1916-1917.

1 comentario :

  1. Muy interesante,sí...tiene un aire entre misterioso y amoroso,me gusta. Un saludo.

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