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martes, 29 de junio de 2010

ES HORA DE EMBRIAGARSE, CON POESÍA, Nº 6


Para que luego digan que en los meses de verano no se mueve nada. Sí, hace calor, se nos achicharra el seso, las tardes son de terracita o de Mundial (tal vez de ambas cosas), pero en realidad las cosas que tienen que ser y tienen que estar siguen ahí, como faros en la noche a los que aferrarnos para salvar una tormenta. Bajo la calima recalcitrante de Madrid, mientras los aires de un asfalto parcheado reverberan al sol, La Vida Rima continúa con su vocación de iluminaria cultural (o contracultural, como gustéis), buscando la felicidad a través del arte. Su sección editorial insiste afortunadamente en publicar a autores (más o menos conocidos), textos e ilustraciones que son lo mejorcito del panorama actual.
En breve aparecerá un nuevo número de su revista dedicada al cuento, "Al otro lado del espejo". Será el número 3. Ahora, sin embargo, es el momento de la poesía. El equipo de "Es hora de embriagarse, con poesía" ha vuelto a hacerlo. Es decir, que se ha vuelto a lucir con un nuevo número, el 6, que aparece en su versión digital. En este número tienen cabida poetas como Danilac, Ángel Muñoz, Ricard Millás, Mar Lozano, Ruth Miguel, Salvador Medina Barahona, Jesús F. Galaz, Majo Lemos, Alejandra Novoa, Jesús Vila, Marcos Rodríguez, Samuel Rubinos, David Fernández Rivera, Chema Barredo, Carmen Garrido, David Bobis, Escandar Algeet, Leire Olmeda, María Villa, Ana Pérez Cañamares, Javier Belinchón y Andrés González Andino, o ilustradores como Eva Monogatari, Bárbara Butragueño, Tesa y Marcus Versus, que firma la portada. Muy pronto aparecerá la versión impresa, pero mientras tanto más vale que disfrutéis de sus páginas digitales de altura.


lunes, 28 de junio de 2010

EL LÍMITE DE SYLVIA PLATH

Edge (Límite), último poema de Sylvia Plath antes de irse.

EDGE (1963)

The woman is perfected.
Her dead
Body wears the smile of accomplishment,
The illusion of a Greek necessity
Flows in the scrolls of her toga,
Her bare
Feet seem to be saying:
We have come so far, it is over.
Each dead child coiled, a white serpent,
One at each little
Pitcher of milk, now empty.
She has folded
Them back into her body as petals
Of a rose close when the garden
Stiffens and odors bleed
From the sweet, deep throats of the night flower.
The moon has nothing to be sad about,
Staring from her hood of bone.
She is used to this sort of thing.
Her blacks crackle and drag.

LÍMITE (1963)

La mujer alcanzó la perfección.
Su cuerpo muerto muestra la sonrisa de realización,
la apariencia de una necesidad griega
fluye por los pergaminos de su toga,
sus pies desnudos parecen decir,
hasta aquí hemos llegado, se acabó.
Los niños muertos, ovillados, blancas serpientes,
uno a cada pequeña jarra de leche ahora vacía.
Ella los ha plegado de nuevo hacia su cuerpo;
así los pétalos de una rosa cerrada,
cuando el jardín se envara
y los olores sangran de las dulces gargantas
profundas de la flor de la noche.
La luna no tiene por qué entristecerse,
mirando con fijeza desde su capucha de hueso.
Está acostumbrada a este tipo de cosas.
Sus negros crepitan y se arrastran.


martes, 22 de junio de 2010

RABIA


Desde el encuentro abrupto, curvada bajo el delirio opresor de este quebranto estrófico, la habitación extática en la que alguna vez derramamos líquidos de seda, iridiscencias tristes, promisión de lenguas y caleidoscopios que acaso encubrían la luz hasta hacerla espejo, pero con la inconcebible agudeza del puñal que atraviesa su destino sobre un vértice en el que acaban los mapas, un aterrador dogma que se aboveda en los ojos y las madrugadas.
Tal es la sonoridad del recuerdo. Pieles como muros, moles de sangre antigua, extravertidos pezones, grosor de espuma nutriendo una verga intacta, alguien que olvida girarse mientras el orgasmo asedia el cuerpo.
Iguales a un dios de enormes glóbulos y expertos balanceos, la ausencia y la rabia cautivan con su lóbrego nombre a las bocas hemisféricas y a los amantes depuestos.


domingo, 20 de junio de 2010

EL TIEMPO DETENIDO: ANATOMÍA DEL MOVIMIENTO, DE HAROLD EDGERTON

Corona con una gota de leche, 1957, de Harold Edgerton.


El pasado 9 de junio arrancó una nueva edición de PhotoEspaña (2010). Una vez más la organización nos sorprende con múltiples y variadas propuestas en torno a la fotografía. De Lázsló Moholy-Nagy a Isabel Muñoz, de Helen Levitt a Adriana Lestido, PhotoEspaña 2010 hace un recorrido por la obra de artistas nacionales e internacionales para todos los gustos.

Para los que estén interesados, este es el video promocional del evento, realizado por La Fábrica TV.







De entre todos ellos, y por lo que tiene que ver con la detención del tiempo, me interesa la exposición Anatomía del movimiento de Harold Edgerton, que puede visitarse en el BBVA / Sala de exposiciones de AZCA,(Pº de la Castellana 81, MADRID). La exposición de Edgerton está conformada por 96 fotografías, un documental y materiales de trabajo de este científico e ingeniero electrónico que consiguió modelos fotográficos constantemente imitados en la actualidad. Edgerton inventó la tecnología que permite fotografiar movimientos que el ojo humano no es capaz de asimilar y así congelar, de algún modo, cualquier mínimo instante con la mayor definición. Una bala atravesando una manzana, la salpicadura de una gota de leche en forma de corona, el salto de un atleta... Momentos detenidos. Así que ya sabéis, no os quedéis paralizados o se os pasará el tiempo de ir a verla. Tenéis hasta el 25 de julio de 2010.

Gussie Moran, 1949, de Harold Edgerton.

viernes, 18 de junio de 2010

SU NOMBRE ERA JOSÉ SARAMAGO


Se acaba de marchar, liviano, tal vez en paz, tal vez con todo dicho. Aquí queda su nombre: José Saramago. Y también sus palabras. Todas. El mejor homenaje, como siempre, será leerlo. Como en este fragmento significativo de Todos los nombres:

La intención de don José, cuando dijo al pastor, Yo me quedo, era permanecer a solas unos minutos más antes de ponerse de nuevo en camino. La única cosa que quería era pensar un poco en sí mismo, encontrar la medida justa de su decepción, aceptarla, poner el espíritu en paz, decir de una vez, Se acabó, pero ahora le había surgido otra idea. Se aproximó a una sepultura y adoptó la actitud de alguien que está meditando profundamente en la irremisible precariedad de la existencia, en la vacuidad de todos los sueños y de todas las esperanzas, en la fragilidad absoluta de las glorias mundanas y divinas. Cavilaba con tanta concentración que no dio muestras de haber reparado en la llegada de los guías y de la media docena de personas, o poco más, que acompañaban al entierro. No se movió durante el tiempo que duró la apertura de la fosa, la bajada del ataúd, el relleno del hueco, la formación del acostumbrado montículo con la tierra sobrante. No se movió cuando uno de los guías clavó en la parte de la cabecera la chapa metálica negra con el número de la sepultura en blanco. No se movió cuando el automóvil de los guías y el coche fúnebre se apartaban, no se movió durante los escasos dos minutos que los acompañantes aún se mantuvieron al pie de la sepultura diciendo palabras inútiles y enjugando alguna lágrima, no se movió cuando lo dos automóviles que los trajeron se pusieron en marcha y atravesaron el puente. No se movió hasta que no se quedó solo. Entonces retiró el número que correspondía a la mujer desconocida y lo colocó en la sepultura nueva. Después, el número de ésta fue a ocupar el lugar de otro. El trueque estaba hecho, la verdad se había convertido en mentira. En todo caso, bien podría suceder que el pastor, mañana, encontrando allí una nueva tumba, lleve, sin saberlo, el número falso que en ella se ve a la sepultura de la mujer desconocida, posibilidad irónica en que la mentira, pareciendo repetirse a sí misma, volvería a ser verdad. Las obras de la casualidad son infinitas. Don José se marchó a casa. Por el camino, entró en una pastelería. Tomó un café con leche y una tostada. Ya no aguantaba más el hambre.

SARAMAGO, J.,Todos los nombres, 2001, Madrid, Punto de lectura, pp. 305-306.

Que don José tenga un buen viaje.

TIERRA


Tierra elemental
toca mis pies,
musgo por lecho
que busco
hacia el corazón profundo.
Tierra.
La palabra es un riesgo
que te alcanza,
pero en arco de verso,
como si al rozarte
un terco extremo
me pudiera estremecer.


miércoles, 16 de junio de 2010

EL OLVIDO, DE VICENTE ALEIXANDRE


Vicente Aleixandre, mi poeta del 27, supo cosas como esta.
"El Olvido" pertenece a Poemas de la consumación (1968).

EL OLVIDO

No es tu final como una copa vana
que hay que apurar. Arroja el casco, y muere.

Por eso lentamente levantas en tu mano
un brillo o su mención, y arden tus dedos,
como una nieve súbita.
Está y no estuvo, pero estuvo y calla.
El frío quema y en tus ojos nace
su memoria. Recordar es obsceno,
peor: es triste. Olvidar es morir.

Con dignidad murió. Su sombra cruza.


lunes, 14 de junio de 2010

EL FINAL DE LOST O LA VERDADERA HISTORIA DE UN HUNDIMIENTO


La cara de Desmond es una realidad metafórica. Su gesto de sorpresa resume a la perfección las sensaciones propias y extrañas que han experimentado nuestros cuerpos (y nuestras almas) después del deseado final de Lost. Sorpresa y contrariedad. Antonomasia de miles de rostros. Cuando casi todo queda sin explicar. En fin, estos son los caminos de la ficción. Carrascal no da crédito al asunto y ha pedido su reingreso en Antena 3 para volver a mirarnos con esa cara que pone en la foto de archivo.



Y aún así hay seguidores de la serie que, tras el palo recibido, ahora dicen que, poco a poco, se van reconciliando con el final catastrófico, quizá consigo mismos. De nuevo estamos ante circunstancias difíciles de entender. Seis temporadas seis. Se dice pronto. No nos extraña que a Bruno Ganz le hierva la sangre. No sólo por ese ridículo bigote que le han colocado para emular a un tal Hitler en El hundimiento, sino por un final que en ningún caso cabía esperar (por facilón).


Sobre ese asunto tenemos en exclusiva la reacción del actor (o del personaje) tras ser informado del estado de las cosas. Unos amigos me mostraron el siguiente documento histérico (digo histórico), y ya no he podido dejar de reir. Aunque los seguidores de Lost ya lo habrán visto, es posible que alguno de vosotros no. Yo así también me rindo.



Video en Youtube.

viernes, 11 de junio de 2010

SUDÁFRICA 2010 O LA FIESTA DEL FÚTBOL


Comienza un mes distinto. Hoy arranca el esperado Mundial de Fútbol 2010 en Sudáfrica, y ya era hora. Hacía tiempo que nos comíamos impacientes las uñas ante la inminencia de un evento que nunca llegaba. No nos olvidaremos de los problemas que azotan al mundo y a nosotros mismos, pero hoy, sí, el balón comenzará a rodar. Hombres en calzoncillos de colores persiguiendo la pelotita en un mar de hierba bien recortada y húmeda. Y moviendo nuestras pasiones.
Por si fuera poco parece que esta vez España parte como favorita. Ya habrá tiempo para darse el batacazo, pero ahora que todo empieza sentimos una extraña alegría, una sombra de efímera felicidad, algo así como el día antes de irnos de viaje o la hora previa a salir un viernes del trabajo ante la perspectiva de un buen fin de semana. Dicen que la selección tiene un equipazo, ¿no? No hace mucho que tuvimos un sueño y ese sueño se cumplió en Viena. Pues entonces, ¿por qué no volver a soñar?

miércoles, 9 de junio de 2010

SEXO (EN LAVAPIÉS)


No, no busquen aquí ningún tipo de contactos (carnales o espirituales), ni piensen que se está preparando una secuela madrileña de Sexo en Nueva York. ¡Ah, el lenguaje, qué economía informativa, qué doble articulación portentosa para la proliferación de los mensajes! Y luego dicen que una imagen vale más que mil palabras. En este caso es posible que una sola palabra despierte en nuestra mente más de mil imágenes.
Imagínense, por ejemplo, una tarde-noche lluviosa como esta, una calle algo empinada con varios bares para elegir. Todos son parecidos, pero en uno de ellos algún poeta ha colocado un cartel sobre la puerta con una sola palabra: SEXO. No apostaremos por el local que posiblemente se llene hasta la bandera esta tarde-noche, aunque deje de llover, no, sería demasiado fácil, demasiado evidente. Y todo por una palabra tan inocua, tan inocente: SEXO. Cuatro letras. Tres en inglés. Como DIOS.
Luego es probable que al cruzar esta noche de miércoles (9 de junio de 2010) el umbral del Badulake Klub (c/Salitre 30, Lavapiés, MADRID), a eso de las 21:00 horas, muchos se encuentren, una vez evaporada la neblina inicial de los ojos (y de las mentes), con un espectáculo que no podrán olvidar. Porque dos poetas, dos cuerpos dos sexos, dos jugadores entretenidos con las palabras se encontrarán en un ring imaginario versando (reversando, perversando) sobre eso, sobre SEXO. En una nueva velada poética organizada por La Vida Rima.

Ángel Voltios VERSUS Nares Montero.
Nares Montero VERSUS Ángel Voltios.
Hoy.
Esta tarde-noche.
En el Badulake Klub.
No se lo pierdan.
Les prometen.
SEXO.
Y si quieren.
Al final.
Podrán unirse a la fiesta...

...con sus propias reflexiones, comentarios, poemas y/o textos sobre.

martes, 8 de junio de 2010

HIMNO A NÉMESIS, DE MESOMEDES DE CRETA


Mesomedes de Creta fue un compositor y poeta lírico en la Grecia del siglo II d.C., liberto del emperador Adriano. Su importancia radica en que no sólo se conservan algunos de sus epigramas sino también sus notaciones musicales, lo que nos ha permitido en cierto modo saber cómo sonaba la música en la época grecolatina. La obra más conocida de Mesomedes es este Himno a Némesis. Némesis era la diosa griega de la justicia, la venganza y la fortuna. En la imagen apergaminada encontraréis el texto del Himno a Némesis en griego clásico, recogido y estudiado minuciosamente por William S. Annis (Aoidoi.org).


Os dejo aquí una atrevida traducción y una muestra sonora del Himno, interpretada por el Atrium Musicae de Madrid, dirigido por Gregorio Paniagua.
HIMNO A NÉMESIS
Némesis, alado equilibrio de la vida,
diosa de oscuros ojos, hija de la Justicia,
tú que dominas la vana arrogancia de los mortales con inquebrantable brida
y condenando la dañina vanidad, la negra envidia eliminas.
Bajo tu sempiterna rueda intangible
vira la fortuna de los hombres.
Sigilosa acechas y la insolencia vences;
con tu vara siempre mides nuestras horas
y ceñuda vigilas nuestros pensamientos,
sosteniendo en tu mano la balanza.
¡Apiádate de nosotros, dichosa, alada Némesis,
justo equilibrio de la vida!
¡Alabada diosa Némesis inmortal,
vehemente victoria de alas extendidas, infalible,
tú que nos muestras el alto pedestal de la Justicia;
tú que quebrantas la soberbia humana
y a los hombres arrojas al Tártaro!



Vídeo en Youtube.

lunes, 7 de junio de 2010

VIOLETA CASTAÑO, POESÍA EN (EL) LIBERTAD


Si la poesía de Violeta Castaño es ya de por sí envolvente y cálida resultaría un tanto absurdo pensar que esta tarde de lunes (7 de junio de 2010), a eso de las 20:00 horas, su voz y sus palabras, acompañadas por los acordes flexibles e infinitos de Adrià Navarro, no habrían de percutir, vía sentidos, en cada uno de nuestros rincones más profundos. Con esa austeridad del momento justo. Con esa verdad.
Si la poesía de Violeta Castaño es ya de por sí envolvente y cálida resultaría un tanto absurdo pensar que esta tarde, de lunes, de junio, exactamente a las 20:00 horas, hay cosas mejores que hacer, caminos más audaces que seguir.
Es tiempo de daros esa oportunidad, entre amigos, disfrutando del lugar y la palabra, de la voz.
No os lo neguéis. Violeta os espera en el Café Libertad 8 (c/Libertad, 8, Metros Chueca o Sevilla, MADRID).

miércoles, 2 de junio de 2010

GEOGRAFÍAS LITERARIAS: GÁRGOLAS EN LA GALERIE DES CHIMIÈRES (NOTRE-DAME DE PARIS)

Grupo de gárgolas obra del arquitecto y restaurador Eugène Emmanuel Viollet le Duc oteando el horizonte de París desde la Galerie des Chimières de la catedral (Notre-Dame) de París.

Un sueño alguna vez cumplido: ascender a través de la intermitable escalera que lleva a la Galerie des Chimières, ese estrecho corredor al aire por encima del rosetón que flanquean las dos torres de Notre-Dame de París, apoyarse en la balaustrada sintiéndose por un momento en vilo, a la merced del viento, y entonces otear a lo lejos, contemplar ese paisaje urbano, el Sena rompiendo en dos la imagen como buena cicatriz cruzada de puentes, y en algún lugar del panorama una torre inconfundible y metálica, mucho más joven que estas piedras; o desviar la mirada hacia el atrio, émulos de Quasimodo, para comprobar la relatividad de los espacios y, una vez más, nuestro proverbial aspecto de hormigas.
Por el Quasimodo jorobado y heróico que inmortalizó Victor Hugo (1802-1885) subimos y subiremos muchos hasta aquí, para comprobar una y otra vez, a vista de gárgola, que Esmeralda ha escapado de la horca y ahora se fotografía junto a los transeúntes que recorren la gran explanada. Es innegable que lo que hizo aquel jovenzuelo de veintiocho años al publicar en 1831 esa gran novela dividida en once entregas titulada Notre-Dame de Paris fue catapultar el edificio (ya de por sí importante) hasta esa suerte de mito romántico que es hoy. Mito trágico que nada tiene que ver con la adaptación de Disney. Mito gótico-literario, además del original arquitectónico. Consiguió dar vida a estos muros, humanizarlos de algún modo. Tal es el poder de la literatura. A veces.
La fotografía que encabeza este texto os puede dar una ligera idea (a los pocos que aún no hayáis estado allí) de lo que os cuento. El grabado de más abajo fue realizado por Alfred Barbou para la primera edición del texto de Victor Hugo. Como curiosidad, ni las gárgolas de la fotografía ni las del grabado estaban ahí en 1831, cuando Victor Hugo escribió Notre-Dame de Paris. Son una ficción, una reconstrucción del pasado. En efecto, no fue hasta 1844 cuando comenzó la restauración de la catedral de París, devastada por el paso del tiempo, las revoluciones y otros acontecimientos. Eugène Emmanuel Viollet le Duc, arquitecto encargado de la misma, completó la balaustrada de la Galerie des Chimières con las gárgolas decimonónicas que hoy conocemos, mucho más grandes que las originales y desaparecidas de origen medieval. ¿Se basó en aquellas o en el texto de Victor Hugo? En realidad no importa demasiado. Están bien ahí donde están, presidiendo esta geografía literaria.

ARCHIVO 02: Galerie des Chimières, Notre-Dame de Paris, con los codos apoyados, la mirada hacia adelante...


Ilustración de la edición original de Nuestra Señora de París, de Victor Hugo, realizada por Alfred Barbou (1831).

martes, 1 de junio de 2010

FRANQUEZA


El abrazo esférico, ajeno a la contemplación, de la aurora y el éter.
Seda intacta, sólo la seda que se desplaza.
Sol alienta el labio, quietísimo sol licuefacto.
El peso mortal inesperado. La vida incógnita.
Secretos.
El dolor cicatriza. Y el sueño.
Mudan las vertientes del hemisferio. Libélulas tenues anuncian un laberinto de tendones. Las clarividentes biblias entrechocan sus pitones portentosos. La plaza que aglutina toda mi atención ahora no es más que una copia inédita rociada de esperma, de astigmatismo y coincidencias. Civilización disonante para esquemas derivados de otros mundos.
Los ponches y los muladares se desgastan adheridos a los muebles indefensos, fruto de cantinelas y chinchetas.
El espejo ardiente, como las caderas.
Los nombres escondidos detrás de los subtítulos: la tela se tiñe de sangre cursiva desprendiéndose de las toscanas.
La oscura depresión de la cama, manchada de perennes luchas; hueco en la memoria al fin, vuelve velo al anfitrión de la mañana.