Psicotratamiento sistemático combinado con la medicación adecuada. Pastilla verde. Eso dicen. Amanece apenas. Pastilla azul. Entonces me liberan de las correas con las que sujetan mis muñecas, al final del día, a ambos lados de la cama. Pastilla roja. Pero tal hecho no me permite alcanzar el necesario descanso porque extinta la luz, la noche siempre se mueve.
-¡Recuerde! -insisten tenaces, diría incluso que algo temerosos. Querrían saber, lo sé, y a la vez temen desvelar en mí determinados recuerdos. Pastilla verde. No conozco cuales, pero recelo de su obstinación, intuyo sus aprensiones. Pastilla azul. Demasiadas preguntas, demasiado interés asumen en el despertar de mi mente. Pastilla roja.
A veces me divierto imaginando que tengo un agujero en el cerebro, una sima abismal por la cual van resbalando hacia la nada los sucesos, los lugares, los nombres, las imágenes toda una vida que ahora es para mí sólo una sombra. Pastilla verde, roja, azul. Pero acallo lo que existe: tu rostro y tu nombre, la piel que horadaba mi lengua. Me contengo y miento, tiro las pastillas al retrete, vigilante, más allá de este supuesto agujero de olvidos. Porque en tu espalda brota un manantial de nostalgia recupero el hilo, porque acantilado a tu cuerpo labraba el labio me reconozco en el recuerdo.
Todo lo adormezco y aquieto. Respiro los días y abomino las noches. Finjo y detengo el tiempo, nunca tiro la toalla. Sálvame. No dejo de hacer muescas en los muros. Ya son demasiadas, resulta imposible ocultarlas. A ellos les intrigan, creen vislumbrar en tales marcas un indicio de recuperación. Se equivocan, pero poco me importa. Disimulo. Aguardo mi oportunidad para escapar. No, no deben saber que, desde hace días, vuelvo a ser yo mismo.
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Si quieres conocer el resto del relato, aquí tienes los enlaces:
La noche se mueve (I: Algo se mueve)
La noche se mueve (II: Minotauro)
La noche se mueve (III: Diagnóstico)
La noche se mueve (IV: Un nombre en un susurro)
Luis Morales La noche se mueve Pastilla verde, roja, azul Relato Cuento Mar de Cenizas
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