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domingo, 30 de agosto de 2009

ARCÓN DE TITUBEOS


Sin embargo te codicio, ahora que tu estela vuelve
a cruzarse en mi camino como un garfio atroz en la madrugada,
te codicio el blanco lugar que estremeces cuando estoy dormido,
mientras los delirios del sueño me golpean
y siento la repugnante trepidación de algún tentáculo fugitivo en el bestiario,
te codicio el pertinaz arcón de titubeos,
desde el acabamiento que habito te deseo,
porque basta rehacer el incauto mecanismo de tu voz,
voltear los olvidos hasta el margen de tu nombre
para que a mí me desanuden las palabras
y pueda retorcerle los brazos a este estúpido molusco.

1 comentario :

  1. Te sigo desde hace un tiempo porque me encantan tus escritos.
    Enhorabuena por tu blog. Es fantástico en diseño y contenido.
    Enhorabuena por tu dominio de la lengua que te permite escribir como lo haces.
    Un abrazo

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