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lunes, 27 de abril de 2009

BESTIARIO DE JULIO CORTÁZAR

De Cortázar se ha hablado tanto que ya no queda apenas nada que decir. Su aliento creador y el modo especialísimo de experimentar transversalmente con la literatura en todos sus géneros y más allá de ellos lo ha convertido en una figura indispensable para los miles y miles de jóvenes que a lo largo del tiempo (y desde que fue apareciendo cada una de sus obras) han querido recorrer con él los caminos menos accesibles y evidentes del arte de narrar.
A veces he conversado con amigos acerca de lo que ocurriría hoy en día si Cortázar aún viviera, y sin llegar a ninguna conclusión clara, siempre hemos acabado pensando que en internet un tal Cortázar se movería como pez en el agua. Es más, posiblemente sería capaz de utilizar todas sus herramientas para darle la vuelta a la estructura e inventar una nueva forma de ver las cosas.
Siempre es interesante acudir a los primeros momentos de un escritor, porque a menudo en esos textos jóvenes se perciben formas y oscilaciones germinales, vírgenes, que luego el paso del tiempo y de los libros puede dulcificar, reduplicar o repetir hasta la extenuación, desvirtuando el extrañamiento inicial. Por eso me gusta destacar su primer libro de relatos, Bestiario, publicado por primera vez en 1951, justo antes de su "exilio francés". Ya había publicado poemas con anterioridad (Presencia, 1938), pero en lo que atañe al relato, este será su primer libro completo. Bestiario contiene, en concreto, estas ocho joyas:

  • Casa tomada
  • Carta a una señorita en París
  • Lejana
  • Ómnibus
  • Cefalea
  • Circe
  • Las puertas del cielo
  • Bestiario

Podría extenderme más de lo debido si me pusiera a analizar uno a uno todos ellos (el simbolismo de los conejos en "Carta a una señorita de París", el debate sobre lo que es una mancuspia en la obsesiva condenación de "Cefalea", la revisión clásica del mito homérico en "Circe", la hacedora de dulces, la mezcla mágica y lógica de realidad y ficción en la mirada de la niña protagonista de "Bestiario", y un largo etcétera), así que voy a destacar la virulencia iniciática del primero de todos ellos, "Casa tomada". Descubrir la calidad de los demás dependerá de los lectores que aún no se hayan enfrentado a los mismos. Cortázar escribió "Casa tomada" hacia 1947. Fue Jorge Luis Borges, autor con quien siempre mantuvo una relación de amor-odio, el que sin embargo se lo publicó en la revista "Anales" de Buenos Aires. Sin duda Borges había visto algo en él. En el 51 encabezaría, como ya he dicho, la lista de relatos de Bestiario.

"Casa tomada" arranca con un estilo narrativo realista para escorarse paulatinamente hacia un panorama distorsionado de las leyes naturales.

Un resumen aproximado del relato:

Bajo la narración de uno de los protagonistas se nos cuenta la historia de dos hermanos que siempre han permanecido juntos en una casa colonial muy antigua, a la cuál han dedicado su vida para mantenerla y cuidarla. Ninguno de los dos se ha casado bajo el pretexto de cuidar la casa y les asquea la idea que un día, cuando ellos mueran, primos lejanos la vendan para enriquecerse. Después de una detallada descripción de la casa y de las meticulosas costumbres de sus habitantes, encontramos el nudo: a causa de unos extraños ruidos (susurros, el volcar de una silla...), estos dos hermanos tienen que ir abandonando partes de la mansión que son tomadas por los intrusos. Las incursiones de éstos acaban por tomar toda la casa y los hermanos tienen que irse, tirando la llave por la alcantarilla para que ningún desafortunado ladrón entrase y se encontrase con la casa tomada. En ningún momento del cuento el autor deja claro de qué naturaleza son estos intrusos. De todos modos es sorprendente con que facilidad y resignación los dos hermanos abandonan la casa, su casa, la que los ha mantenido unidos y a la que han dedicado tanto tiempo, sin ni siquiera intentar luchar.

Pero esto es un resumen. Nada que ver con la lectura del relato en si. Os lo dejo aquí, en por la propia voz de Cortázar. Escuchádlo y condenaros.

Bestiario, Madrid, Ed. Punto de Lectura, 2006


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