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viernes, 31 de julio de 2009

TRAVIS BICKLE VS TRAVIS BICKLE


Desde luego que estamos ante uno de esos monólogos imprescindibles de la historia del cine, Robert De Niro en la piel de Travis Bickle, retando a su imagen al otro lado del espejo en Taxi Driver (1976), de Martin Scorsese. Y dicho sea de paso, una de las mejores interpretaciones del actor, al que Scorsese supo sacarle su jugo.
Pero la cuestión que palpita una vez más en este asunto es, de nuevo, del todo emocional, casi proustiana, y depende sobre todo de aquello con lo que nos ha tocado crecer (individualmente, a cada uno). En la versión original Robert de Niro demuestra sus dotes con creces, pero si te has acostumbrado toda la vida a asociar una cara y una voz, si cada vez que ves moverse a Bickle delante del espejo, esperas escuchar un "¿Me estás hablando a mí?" en vez del "You talkin' to me?", si sabes que esa voz no es la de Ricard Solans, doblador habitual de De Niro al castellano, acabas por pensar que hay algo raro en todo esto, que algo falta, que De Niro no es del todo De Niro. Os dejo las dos versiones. Lo dicho, sobre gustos...


VERSIÓN ORIGINAL (Inglés)



VERSIÓN DOBLADA (Castellano)



jueves, 30 de julio de 2009

LLUVIA A DOS (DIALOGATO, O RELIÁLOGO)


-Nos abalanzamos sobre los goznes.
-Cuando se presentó la lluvia, sí. No fuéramos a calarnos acá mismo.
-Nos tomó la noche en aquel paraje.
-Los hay que aborrecen el exceso de agua.
-Otros inventaron aquella máquina para mover las nubes.
-Es el fenómeno de la escasez.
-Esos maniacos lo deshicieron todo.
-En alguna covacha del desierto de Nevada. Valientes hideputas.
-Nada malo pretendimos.
-Una escapada de fin de semana.
-Por tierras de Castilla, detrás de algo.
-O de nada.
-De nosotros.
-Buscábamos apenas un alivio para nuestras mentes.
-Si hubiéramos experimentado las complejidades de este mundo.
-Tal vez habríamos podido descubrir.
-Destruir, entonces.
-En cada gota.
-La insignificante existencia de Dios.
-Solos.
-Afirmados en el lodo de los ríos.
-Gozando de nuestros propios meandros, excesivos, bajo puentes.
-Bajo espejos y ruletas.
-Bajo relojes.
-No en ciudades, sobre irresolubles catres, batallando.
-De allá vinimos.
-Por los últimos bosques espléndidos, ahítos de tanta muchedumbre.
-Donde sólo las carreteras son secundarias.
-Propicios espacios de deterioro para automóviles ancestrales.
-Qué odisea del carajo, figúrense, comensal que viene a tavola sin anunciarse.
-Aquel clavo reventón en el neumático.
-Sin ser siquiera presentado.
-Qué coño pinta aquí esa especie de luthier que eres tú.
-Recreador de instrumentos obsoletos.
-Inventados.
-¡Che! Boludo. Estudiantillo de mierda. ¿Acaso te crees que lo tuyo es mejor?
-Investigo tradiciones.
-Olvidadas. Vaya piola de laburo. Ni siquiera sacás guita por ello.
-¿Y eso te importa?¿Por qué viniste entonces?
-Dejálo. La misma lluvia nos habría sorprendido en Madrid.
-Una losa de nimbos grises, algodonal pétreo que amenaza.
-Cortado por las alas del acero.
-Planeadoras.
-De algún bimotor afanoso.
-Serio simulacro de borrascas.
-Tejido licuefacto, vacío del exprimidor.
-Para un difícil caminar ajeno a las palabras.
-Este… dirás a los paraguas.
-Ante la fábrica anodina, su sello de abandono.
-Toda de muro blanco.
-Sin nombre.
-Lleváme a casa.
-Llamadme ninguno.
-En el cobertizo esférico se adivina.
-Ninguno es mi nombre.
-Sobre los boletos premiados, qué rico recostarse como lotófagos, y escuchar.
-El tableteo.
-Sobre el maderamen del sofito.
-Como ninguno me conocen mis padres, y también mis amigos.
-Una grúa coronando el granero.
-Un insecto.
-Visto a lo lejos, aquel engendro de tubos semejaba a una enorme mantis metálica que devorara, inexorable, el edificio.
-Oye…
-Dime…
-Estoy pensando…
-Ah, pero vos pensás…
-¿Y si la lluvia no mojara?
-No tenemos la respuesta.
-¿Ninguna?
-Ninguna.
-Aunque aquí nunca llueve.
-Siempre, según parece.
-Siempre, en la estación húmeda.
-Siempre, atolondradas carcasas permeables.
-Siempre seguimos rutas equivocadas.
-Inconexas. Andá, entremos.
-¿Qué buscamos?
-Ahora nada. Algo de cobijo.
-¿Te fijaste?
-Tal vez.
-El agua respiraba.
-Queremos decir…
-Que era como si aquel líquido hubiera aprendido a resbalar.
-Sin apenas rozarnos.
-Señal caliente.
-Densa.
-Rehilada.
-Rayos de lluvia se volcaban desde el cielo.
-Lo supimos ahora.
-Junto a la enorme puerta.
-De la estructura vieja y sin ventanas.
-Olvidados por los perros.
-De rabeles y músicas.
-De nuestros contornos encontrados.
-De sus fauces el vapor.
-Cortinaje efímero que manaba pálido.
-Esdrújulo.
-Térmico.
-Exhalando promesas de una falsa vida, casi pálpitos.
-Nosotros no parábamos de hablar.
-Tan callados.
-Y tanto.
-Cuatro pupilas en cruce.
-Nosotros no estábamos allá para hablar. Vos sabés…
-Cuatro entrecruzadas piernas.
-Dos raciones de láminas bocabajo.
-Escribir.
-Describirnos.
-Escribirlo es algo abrupto, experimental.
-Nada demoledor.
-La única lluvia que no moja está hecha de letras, de música.
-Dejáte de noemas. Acá se vino a vivir.
-Nos abalanzamos sobre los goznes.
-Cuando se exhibió la lluvia, sí. No fuéramos a calarnos acá mismo.
-Que crujiera el aire en el interior.
-Nunca debió pasarle a dos extraños.
-¿Cómo dos extraños?
-¿Acaso conocés vos mismo quién sos?
-¿Cómo era aquella canción?
-Por las riberas de río limones coge la virgo.
-Hilo de oro mana la fontana, hilo de oro.
-Pajarito que vas a la fuente, bebe y vente.
-Y los dos amigos, idos se son, idos.
-¡Bah!, asocarronadas para terratenientes.
-Idos fuimos, tan cercano estaba nuestro abrigo.
-Y bien que nos holgamos, ja, cuidando de entretenernos.
-Faltó la bruja.
-¿Para qué? Nada hubiera conseguido desmoralizarnos.
-No podíamos salir.
-La riada nos bloqueó el paso.
-Pero ella si entraba.
-Alguien se dejó una rendija abierta.
-¿Qué esperábamos?
-Acá parados, rejodidos.
-Mientras subía el nivel del agua.
-Odié la natatoria desde chico.
-Nos agarramos a las balas de heno, flotantes.
-Nos llegaba la humedad al bocho.
-Como a Paul Newman en una película.
-Y como acabó el pez.
-Mejor que nosotros.
-Callá, pendejo.
-¿Y si la lluvia no mojara?
-¿Otra vez esa pelotudez?
-Si no mojara…
-Vos si que sos…
-Si la lluvia no mojara se zanjaron:
-El resfrío atávico, los descansos, las anginas.
-Ningún agua por extensión remojaría.
-Y todo baño quizá careciese, al fin y al cabo, de sentido.
-No más extensiones, decisiones, desbastes, canalizaciones.
-Pero la cuestión es que…
-Si a menudo sucedieran estas cosas.
-Si ese fulgor blando que remoja, labio líquido que alimenta una y otra vez.
-Un día se apagase.
-Qué sería de nosotros.
-Perdidos en un lugar del cuento.
-Sedientos. Desaparecidos. Sudando tinta.
-Ya no podríamos seguir queriéndonos.
-Callá, gallego barrila.
-Si ya la lluvia no mojara…
-Vos sabés que fue por eso.
-Cuando se marchó la lluvia, sí. No fuéramos a extinguirnos acá mismo.
-Nos abalanzamos sobre los goznes.
-Volaron las almas como Ícaros.
-Mientras nuestros cuerpos callaban.
-Como las de otros muertos, allá, en el lecho que dejó el río.

miércoles, 29 de julio de 2009

ECOS DE LA VIDA RIMA


Poquito a poco, sin prisa pero sin pausa, la Asociación Cultural La Vida Rima se va haciendo un hueco en el panorama madrileño y sus diversas acciones poéticas empiezan a ser conocidas y valoradas por algunos medios.
Esta vez ha sido el periódico digital "SomosMalasaña.com" el que se ha hecho eco de la última iniciativa vidarrimera, Este árbol apadrina este poema, de la que ya hablé aquí no hace mucho tiempo. A propósito de esta iniciativa, José Naveiras, uno de los fundadores de la Asociación, relata en la entrevista de Antonio Pérez para "SomosMalasaña.com" los orígenes, las noches del Bukowski Club, las vicisitudes, las propuestas creativas y los sueños de este grupo de poetas, músicos, artistas, y realizadores unidos por esa búsqueda de la felicidad. Además, el artículo ha dejado enlaces que os llevarán a los vídeos de La Vida Rima, así como a las ediciones digitales de sus dos revistas, Es hora de embriagarse (con poesía) y Al otro lado del espejo. No está nada mal.
Una vez más enhorabuena.
Podéis encontrar el artículo pinchando aquí.

22 X DON LUIS


Una opción para cinéfilos, cineastas, trotamundos y otros animales sueltos que todavía no sepan que hacer la primera semana de agosto. Javier Espada, director del Centro Buñuel de Calanda (CBC) propone la 5ª Edición de 22xDonLuis (Películas que habría querido ver Buñuel). Se trata de una serie de proyecciones esenciales de películas dirigidas por mujeres.
En esta ocasión es posible disfrutar, del 1 al 8 de agosto de 2009, del buen cine de la mano de Roser Aguilar, Vicky Calavia, Mapi Galán, Ángeles González-Sinde, Chus Gutiérrez, Marta Horno, Sonia Llera, Claudia Llosa, María Lorenzo, Jeanine Meerapfel, Elisa Miller, Yulene Olaizola, Paula Ortiz, Pilar Palomero, Mercedes Sampietro y Helena Taberna.
Además se inaugurará la exposición Miradas contra el olvido: 1948-2009 de Jan van Eden, acompañada del estreno del corto El Belén rodado en Calanda y de los documentales I. La historia y los mitos, II. La lucha por la tierra y III. La Nakba permanente de Marco Calvo Lafarga y Alberto Andrés Lacasta.
También han sido seleccionados Check point de Sonia Llera y No le digas a mi madre que estoy... en Tierra Santa de Diego Buñuel.
En la inauguración se proyectará el documental El último guión de Javier Espada y Gaizka Urresti, seguido de un concierto de Ángel Petisme.
Cenizas del cielo de José Antonio Quirós clausurará el Festival en homenaje a Luis Buñuel.
Además se podrán ver los documentales Lágrimas de Wayronco de Jorge Meyer, Manuel Rotellar. Apuntes desde la fila 8, de Vicky Calavia, A las puertas de París de Marta Horno y Joxean Fernández y José Antonio Labordeta. Con la voz a cuestas de José Miguel Iranzo y Joaquín Carbonell.
Además se ha programado un ciclo dedicado a la directora Jeanine Meerapfel.
Así que nada, cine para todos los gustos destinado a los que quieran darse un paseo por Calanda. Las proyecciones en 35mm se realizarán en el patio del CBC a las 22:00, y la entrada es libre y gratuita en todas las actividades hasta completar el aforo.
Este es el anuncio del evento.



Para más información buscad en http://www.cbcvirtual.com/

martes, 28 de julio de 2009

ELEPHANT DE GUS VAN SANT

Gus Van Sant es un hombre-orquesta de esos que siempre me han gustado: guionista, fotógrafo, músico y, por supuesto, director de cine de los menos convencionales. Excéntrico en el sentido etimológico del término, gravita alrededor de ese agujero negro creativo que es la industria cinematográfica mainstream para poder hacer lo que quiere y sabe hacer, un cine distinto que, sin embargo, no deja de sentir el influjo de la gravedad. De algún modo Van Sant resiste en la frontera, atmosférico, sin perder el control ni difuminarse en un espacio de experimentación vacío. Por eso ha hecho cosas como El indomable Will Hunting, Encontrando a Forrester o la reciente Milk, por eso se atrevió en su momento a realizar un remake de Psicosis en el que cada plano era idéntico a los rodados en su día por Alfred Hitchcock (algo que, por cierto, poca gente valoró como acto creativo) o a crear películas introspectivas y elípticas como su penúltima Paranoid Park, Gerry o la inolvidable (y nuevamente incomprendida) Last days, cuyo visionado inspiró un poema con título explícito, K cabrón eres Gus Van Sant.


Elephant (2003) fue realizada entre estas dos últimas y conforma junto a ellas la Death Trilogy. En efecto, las tres películas indagan sobre los diferentes aspectos y formas de relación entre el individuo y la muerte (propia o ajena). El cielo se va viendo amenazado por unas nubes que oscurecen paulatinamente. Un día cualquiera en un instituto de Portland, Oregon. Elephant es una película de elaboración aparentemente sencilla y temática controvertida que sin embargo alcanzó un gran éxito entre la crítica internacional, llegando a cosechar la Palma de Oro en el Festival de Cannes. Básicamente Van Sant traslada en Elephant los hechos de la matanza de Columbine, pero contados desde dentro. La aparente insustancialidad de las historias personales va desplegándose a ritmo de plano secuencia Steadycam. Esa cadencia lenta y el hecho de ver constantemente el cogote de los personajes fueron aspectos no del todo entendidos por el público. Depende del tipo de cine que os guste, así de sencillo. Quien espere la clásica estructura de planteamiento, nudo y desenlace o busque un clímax y un anticlímax acabará aburriéndose. Pero ese ardid semisubjetivo de videojuego y el multiperspectivismo de los prolegómenos de un rápido y brutal desenlace convierten a esta película en algo único.
Película de pocas palabras, Elephant no las necesita para transmitir la inquietud porque el espectador ya sabe el final de la historia. No sabemos de los muchachos que recorren los pasillos del instituto prácticamente nada, algún que otro gesto, alguna que otra costumbre adolescente estereotipada y lógica, pero ningún pensamiento que trascienda. Van Sant transmite una normalidad que se hace más sórdida porque conocemos lo que va a ocurrir. Los chicos y las chicas caminan así, inconscientes, hacia el matadero, sin hacer caso de los signos. Pero la muerte encontrada, casual, no tiene un significado preciso, e inmediatamente frustra cualquier búsqueda de sentido. Mientras avanza la Sonata Claro de Luna de Beethoven Van Sant muestra brillantemente lo absurdo de esta situación, en la que los pasillos del instituto pasan a ser otro nivel más que recorrer en este juego de irrealidad.
Os dejo un montaje en tiempo real de los últimos momentos previos a la tragedia, desde todas las perspectivas barajadas en Elephant.

Título: Elephant (2003)
Título original: Elephant (Estados Unidos)
Dirección: Gus Van Sant
Producción: Dany Wolf
Producción ejecutiva: Diane Keaton, Bill Robinson.
Intérpretes: Alex Frost, Eric Deulen, John Robinson, Elias McConnell, Jordan Taylor, Carrie Finklea, Nicole George, Brittany Mountain, Alicia Miles, Kristen Hicks, Bennie Dixon, Nathan Tyson.



lunes, 27 de julio de 2009

TRAICIÓN A LA COMA


Traición a la coma me irrumpe palabras donde no llamas
exige el flujo ardid que canta para un grito sin aspecto
se agita la perla condición de sus alas
y quién sabe cuántas veces
desata su pluma delirios rojos como versos
por un cielo de estorninos que oscurece en Termini
o me desgarra la expresión de un horizonte
romano antaño violento

si
tan
sólo
no

GUIÓN ADAPTADO: OLIVER TWIST DE CHARLES DICKENS

Fotograma del Oliver Twist de Roman Polanski (2005)

Desde hace tiempo tenía ganas de afrontar una sección de este tipo, en la que grandes y no tan grandes ejemplos de la literatura universal se enfrentasen a su versión (o versiones) cinematográfica(s). No es que sea algo demasiado original o innovador. Tampoco será deliberadamente exhaustivo. Como muchas de las cosas que aparecen en este blog, se trata más bien de un intento de trasladar y compartir con otros mi propias inquietudes al respecto de un asunto que aúna dos de mis aficiones favoritas. Literatura y cine, cine y literatura buscando una deuda, una lógica irreal para esa absorción correspondida de espacios y tiempos. La fórmula será sencilla. Un pequeño resumen de la novela, relato o cuento adaptado y una posterior referencia a sus posibles versiones en la gran (y a veces en la pequeña) pantalla. Nada del otro mundo.
Para comenzar será mejor ir sobre seguro. Nos espera el Oliver Twist de Charles Dickens (1812-1870).

Oliver Twist, la novela victoriana por excelencia, es a Charles Dickens lo que el Quijote es a Cervantes. Fue escrita y publicada por entregas entre 1837 y 1839 para la revista "Bentley's Miscellany". En ella Dickens traslada las estruturas clásicas (nacimiento elevado - pérdida de status social - aventuras y desventuras - anagnórisis final y recuperación del status) a la Inglaterra decimonónica. Pero esa estructura no significa que la particularidad de lo narrado pierda fuerza. La visión dickensiana de un Londres marginal y bajofondista se ha convertido en algo proverbial. De hecho la primera imagen que la gente suele asociar cuando se habla de Dickens es precisamente la de alguno de estos pícaros de ciudad escapando del mercado con su botín.

Oliver Twist narra los trabajos y penurias de un muchacho huérfano, que desposeído de su condición social al nacer, pasará por todo tipo de situaciones ingratas (maltratos en el orfanato, explotación como ayudante de sepulturero, caída en el mundo del hampa londinense, a las órdenes de Fagin y su banda de delincuentes adolescentes, de los que trata en varias ocasiones de escapar). Oliver no es un pícaro, sino un muchacho arrastrado a los bajos fondos por las circunstancias (sociales y humanas) de su tiempo. Sólo al final recupera su identidad y posición, en un happy end de lo más clasicista.

GUIÓN ADAPTADO

Fotograma del Oliver Twist de Frank Lloyd (1922)

El cine se nutrió, ya desde sus orígenes, de las historias que le proporcionaba una fuente tan inagotable como la de la literatura. Oliver Twist no escapó a esta fagocitación.
La primera versión del clásico dickensiano data de 1922. Se trata de una película de cine mudo dirigida por Frank Lloyd en la que destaca el personaje de Fagin, encarnado por Lon Chaney . Como curiosidad, Oliver Twist es interpretado aquí por Jackie Coogan, El chico de Charles Chaplin.




Después, las versiones llegan prácticamente hasta nuestros días. En 1948 David Lean se atrevió de nuevo con el clásico llevándolo a su mejor adaptación, una visión casi expresionista, muy apropiada para el contexto miserable de aquel Londres victoriano.

Fotograma del Oliver Twist de David Lean (1948)


En el Oliver Twist de Lean brilla con luz propia de nuevo la figura de Fagin, esta vez interpretado por un inspirado Alec Guinness.



La primera versión en color de Oliver Twist es del año 1968. Se titula Oliver!. Dos curiosidades de la misma: fue dirigida por Carol Reed (responsable, entre otras, de la fantástica versión de El tercer hombre) y además es un musical. Una mezcla extraña y explosiva que se llevó seis Oscars.



La última versión de calidad de Oliver Twist es la dirigida en 2005 por Roman Polanski. De alto nivel técnico y estético, la película de Polanski es un verdadero ejercicio de síntesis que prescinde de algunos de los elementos folletinescos de la novela al mismo tiempo que dota de cierta ambiguedad moral a los personajes. El jugoso papel de Fagin es bordado esta vez por un acertado Ben Kingsley.



Como veis, tenemos versiones para todos los gustos. ¿Con cuál os quedáis?

domingo, 26 de julio de 2009

DEBIERA CAER


Qué poco divertida tu propuesta,
conservar todavía nuestra chiquillada.
Algo ha ido minándola en silencio,
bajo pieles de centella.
No desmientas el miedo:
sé que lo sabes, he cambiado.
Debiera caer el infinito hasta aquí:
no me dejes en paz.
Excavé las ruinas más profundas
para encontrar el viejo fruto y derribarlo.
Supongo que no es eso ser un hombre.
Allí resonaba la melodía indigna.
No desmientas el miedo: dímelo otra vez.
Es tarde. Ahora corro para huir del ruido.
Estoy cambiando, ¡cambiando!
-¿acaso esto es la muerte?-.
Debiera caer, yo también.

sábado, 25 de julio de 2009

ESTE ÁRBOL APADRINA ESTE POEMA


Como si las metáforas colgaran de las ramas, como si hubiera palabras flotando en lo alto, en lo verde. Esta brillante y soleada mañana de sábado La Vida Rima se subirá a los árboles para descubrir lo que esconden entre sus frondosidades. Seguro que alguno quisiera saber cómo colgar sus poemas de los árboles de Madrid. Hoy 25 de junio de 2009 La Vida Rima dará el paso y alcanzará el cielo de la Plaza del Dos de Mayo (Malasaña, MADRID) con el lema Este árbol apadrina este poema. Estarán allí a partir de las 13:30. Estáis invitados a seguir con ellos estos sencillos pasos.
1) Imprime tu/s poema/s y haz tantas copias como quieras colgar (10, 43, 109...)
2) Escribe a mano o imprime (en algún color que se diferencie del negro a ser posible) Este árbol apadrina este poema. Plastifica las copias para que...
3) ... podamos pasarle un hilo con el que atarlo a un árbol sin que se rompa ni pueda ser arrancado de cuajo y convertido en basura.
4) Ven a la Plaza del Dos de Mayo el sábado 25 a las 13:30. Será el punto de partida para irse de cañas (o aguas) por Madrid colgando los poemas, musicalizando la ciudad, fotografiando, lo que os dé la gana...
¿Porque la vida qué...?
¡¡¡PORQUE LA VIDA RIMA!!!!!

viernes, 24 de julio de 2009

ESE HUIDIZO ESPACIO

Alfombra-teclado de Jean Shin


Pero todo se desploma sobre mí,
como si la realidad fuera otra cosa,
un gesto oportunamente opuesto,
no un texto sino su intrusa piel de acelga,
no un sueño sino la ilógica urdimbre de sus desencuentros,
en absoluta coincidencia;
esto no es un sinsentido,
es una tela de sentidos forjados al unísono,
fuera de la anacrónica línea de tiempos.
¡Sí! En qué forma se desbroza el linde,
cómo brota algo con vida encontrado en cada enlace,
cada desordenado cruce,
sobre la plana superficie del tablero.
El mayor placer en los que juegan: siempre encontrarse,
no importa dónde.
No hay sonido que atraviese,
ni flor pestífera,
no hay brillo huidizo manando experiencias,
no amargo pálpito de lenguas,
las palabras conceden el juego,
posibilitan el marfil del unicornio,
el ébano histrión del fauno.
Todo está.
Cayendo sobre mí,
como si la realidad fuera otra cosa,
la nada en que los objetos y los hechos
se coordinan con los objetos y los hechos,
remotos, desconocidos,
creando el adorno,
la histeria,
el accidente
y la posibilidad.


jueves, 23 de julio de 2009

HIJOS DEL TEQUILA



Buena noche de chela y tequila nos aguarda entre conversaderas (y ya saben que los y las de tequila son las más largas) en el Bukowski Club (c/San Vicente Ferrer, 25, Tribunal, MADRID), a vueltas con los versos de voz hermana y a la vez distinta, y es que en el Buko siempre están pendientes de todo lo que llega de México (y de América) porque saben lo que es bueno. Esta noche del jueves 23 de julio de 2009 se arriman los Hijos del tequila para su particular forma de lectura.

Ellos son Israel Buenrostro, Daniel Fragoso, Gabriela Palacios, Óscar Pirot y Carlos Vadillo Buenfil. Como autor invitado acudirá Chema Rubio. Además se inaugurará la exposición gráfica Denominación de origen, de Hugo Martínez Lázaro.

No se pierdan la noche mexicana en el Bukowski Club. A partir de las 21:30 horas.


TRES HOMBRES Y UNA PEQUEÑA DAMA


No, no es que Tom Selleck, Ted Danson y Steve Guttenberg (esos grandes actores de comedia) se pasen por Madrid para darle un paseíto a la niña, Nancy Travis, que, por cierto, a estas alturas de la película (que es de 1990) debe estar lo suficientemente talludita como para que el bueno de Tom se lo piense dos veces (o más) antes de subírsela sobre los hombros.
No, no es que nadie tenga tanta nostalgia como para programar por enésima vez esta maravilla del séptimo arte en las mejores salas independientes del centro.
No, no es que Javier Das, José Ángel Barrueco y Escandar Algeet (esos poetas que llenarán la noche) se pasen por Tapas y Fotos (c/Doctor Piga, 7, Lavapiés, MADRID) llevando a cuestas a su particular Pequeña Dama, Isabel García Mellado, ni que vayan a tener en cuenta su sexo o su tamaño deliberadamente pequeño para cederla el paso en la puerta o en la lectura de los poemas.
No, no es que esta noche de jueves (23 de julio de 2009) sea el mejor momento para perderos el recital conjunto de Tres Hombres y una Pequeña Dama, que arrancará a las 21:30 horas en la dirección susodicha.
No, no es que la editorial Ya lo dijo Casimiro Parker no haya querido traerse a Tom Selleck, Ted Danson y Steve Guttenberg para su particular evento y homenaje. Ellos han declinado educadamente la invitación aludiento a supuestos problemas de apretones, digo de agendas apretadas y a menudo hollywoodienses. Pero nos quedamos con los nuestros, ¿verdad?

Tres Hombres y una Pequeña Dama
Javier Das
José Ángel Barrueco
Escandar Algeet
Isabel García Mellado

Tapas y Fotos (c/Doctor Piga, 7, Lavapiés, MADRID)
23 de julio de 2009, 21:30 horas.


miércoles, 22 de julio de 2009

SURREALISMO EN CÁPSULAS


Adictos a la morfina atemporal, a la rapidez con que se vacían los crustáceos, atentos. Se derraman surtidores de lava a buen precio por entre las ávidas marmitas. El papel no tiene campos que restañar con arado indeciso y prensil. Otra noche de cambio climático en el interior de la nevera. Otra noche mitocóndrica sin mitos en la que se admiten perros directos y complementos ladradores. Solución salina para escritores automáticos y cajeros, callejeros etílicos, rumbo a los armaggedones-hormiga, a la altura orgiástica de los esbirros. Solución sonora ante la evidente devastación de las antenas. aaa ñññ aaa ñññ. La enfermedad del tedio recorre nuestras salas globulares e inmensas. aaa ñññ aaa ñññ. El hambre hombriento organiza sus propios linimentos y ciudades. Si el diagnóstico os ruboriza. aaa ñññ aaa ñññ. Si vuestros dedos hablan de verificación y asesinato. aaa ñññ aaa ñññ. Seguid las pautas del tratamiento: la doctora Silvia Oviedo ha preparado media hora de inyección surrealista. aaa ñññ aaa ñññ. En cómodas y prácticas cápsulas.
aaa ñññ aaa ñññ
Cápsula Surrealista II.
Silvia Oviedo.
Este miércoles 22 de junio de 2009, a las 21:30 horas, en la Asociación Cultural Pipo (Travesía de la Primavera, 3, Lavapiés, MADRID).
Imprescindible.

martes, 21 de julio de 2009

ENCERRADO


Cuando las luces agónicas, perdiendo remisas su brillo, ya saboreaban ese rito dulce de la muerte que su temblor incierto destrababa, la noche extraña invadió el cuarto cerrado, y en el espejo que colgaba de una de las paredes no pudo verse nada, pues a tal extremo habíalo invadido la oscuridad. Si alguien hubiera pasado junto a aquella puerta, si la curiosidad le hubiera impelido a escuchar en medio del silencio, tal vez habría podido confirmarnos la existencia de una respiración entrecortada, de cualquier leve movimiento que delatara el más débil hálito de vida. Pero aquella noche el corredor permanecía vacío y deleznable, ajeno al mundo, y ninguna presencia vendría a perturbar la soledad de aquel espacio.
Un perfil desnudo se escondía en la penumbra. La tiniebla le daba una forma imprecisa, era un cuerpo sin forma recorriendo a tientas un cuarto cerrado, unas manos que acariciaban el espejo inútil o caían sobre un desconocido rostro. Hacía frío. La fantasmal silueta no pudo evitar un estremecimiento de los pies a la cabeza. Se tumbó en el pavimento helado, flexionó las rodillas y encogió como mejor supo las piernas entre los brazos.
Allí, como un recién nacido, la figura dejaba pasar el tiempo. Agua de sal mojaba a veces el pómulo izquierdo y resbalaba con parsimonia hasta los labios. Su sabor. Con la piel pegada al suelo sentía cómo el frío atravesaba sin piedad sus entrañas. Silencio. Unos ojos acostumbrados a este mundo de incertidumbres no serían capaces de describirse a si mismos, pero aquella huella grotesca se resistía a desvanecerse en el olvido, en el sueño profundo de los muertos, y se palpaba monótona, impaciente, para comprobar una y otra vez que era, que existía de alguna manera física, que cada centímetro de aquel cuerpo aún le pertenecía. Silencio, ni un ruido, solamente el vacío negro que lo llenaba todo, la nada que acabaría ahogando, sí, que acabaría dominando para siempre, a la que jamás se plegaría, una nada sin reflejo que se parecía a la muerte.
No podía gritar, y aunque de nada le hubiera servido, aquella figura habría dado cualquier cosa por ser capaz de pronunciar una sola palabra. Su garganta no emitía sonido alguno que no se convirtiera en una especie de gutural estertor apagado, casi animal. Y no era un animal, o al menos así lo creía el espectro que tornaba de nuevo a tentarse para desprender de sí aquellas malditas dudas.
Se levantó del suelo de un salto. Quién era. Dónde estaba. Por qué tanta oscuridad, tanto silencio. Arrastró con pesadez aquel cuerpo alrededor del habitáculo. Intentó arrancar con desesperación las maderas que ocultaban las ventanas, pero nada podía hacer con aquellas manos. Golpeó luego lo que le pareció la puerta hasta que el dolor le hizo desistir del intento. No, no había nadie cerca, o de lo contrario ya habrían acudido al escuchar aquellos golpes tremendos que resonaban en el corredor como una tormenta de verano, aquel sonido bestial del dolor.
Quién demonios era, qué le estaba pasando. Debía estar al borde de la locura. El desasosiego acechaba, la confusión y el odio crecían en aquel ser que ignoraba cómo había llegado a parar a aquel lugar, que necesitaba saber, que quería escapar.
De pronto sus manos volvieron a encontrarse con el espejo. Lo tocaron, estaba frío. Nada se reflejaba en aquella noche total. Ceguera. Ningún esfuerzo de sus ojos bastaba para abrir un mínimo espacio a la imagen. Por un momento creyó recordar algo. La bala recorriendo el aire. Antes de apagar la luz. Cuando ya se detenía en la noche para siempre. La mirada del otro reflejada: tú… tú eres copia de una copia de una copia… Antes. Antes de que se apagara la luz. De que la bala alterara el tiempo. Aquella masa informe alzó entonces los brazos y los descargó con las fuerzas que le restaban sobre la superficie bruñida e inservible. La fina hoja se resquebrajó en incontables pedazos que cayeron sórdidos sobre su silueta. Un grito repulsivo surgió de su garganta. “Soy yo”, acertó a decir mientras caía al suelo, quebrantada para siempre la salida, humedad que repta en las muñecas, resuello que adivina, antes de sumirse en el negro pozo de la inconsciencia, la lóbrega e inexorable soledad de la muerte.


lunes, 20 de julio de 2009

EN EL MAR DE LA TRANQUILIDAD


Hace hoy cuarenta años que tres hombres hicieron lo impensable hasta entonces. El 20 de julio de 1969, después de recorrer 384.400 kilómetros hasta la zona lunar, en un largo viaje de cuatro días, seis horas y 46 minutos, el módulo de exploración lunar Eagle del Apolo XI alunizaba en el Mar de Tranquilidad. La Luna pasaba a ser el lugar más lejano explorado físicamente por el ser humano. La ciencia-ficción de Julio Verne se convertía así en profecía de un futuro tecnológico espoleado por una carrera espacial alimentada durante la Guerra Fría a ambos lados del Telón de Acero.
Neil Armstrong caminó por primera vez en la superficie lunar, dejándonos algunas huellas, muchos saltos y una mítica y mil veces repetida frase para la historia: "That's one small step for man, one giant leap for mankind". A esa superficie polvorienta le acompañaría "Buzz" Aldrin, que dice estar ya un poco harto de que siempre le pregunten lo mismo: "¿Qué se siente al pisar la Luna?". El que nunca podrá responder a esa pregunta es, desde luego, el tercer tripulante, Michael Collins, que tuvo que permanecer en órbita para asegurar el regreso. Creo que sin duda este es el papel que a nadie le hubiera gustado jugar.
Mi padre, como tantos otros, lo vio por la tele, aplastado contra la barra de un estrecho bar atestado de curiosos. También para él, como para casi todo el mundo, aquel momento, narrado para España por Jesús Hermida, fue de esos que te ponen la carne de gallina. Aquella generación tuvo esa suerte. La nuestra, casi con toda probabilidad, se perderá acontecimientos futuros, si es que llegan alguna vez. Se habla a la larga de viajar a Marte, pero la realidad es que, ganada la carrera a la URSS y después de unos cuantos regresos a la Luna, la NASA abandonó el proyecto para dedicarse a otras cosas. Por eso hay tantos que han visto en el viaje a la Luna un camelo, una conspiración o una mentira dirigida por el bueno de Stanley Kubrick. Hoy la NASA renquea entre recortes presupuestarios y empieza a sentir el aliento de potencias emergentes que pueden tomarle la delantera: India, Japón y, sobre todo, China, plantean sus propios viajes a la Luna con fines tan prosaicos y detestables como la defensa militar o la prospección mineral nuclear.
En fin, puede que la tranquilidad de ese Mar lunar en el que hace cuarenta años aterrizamos tenga los días contados.
De momento disfruto con las imágenes de aquellos primeros momentos.



domingo, 19 de julio de 2009

COCA-COLA BABY BOTTLE (BIBERONES ICÓNICOS)

Mother and children, Tulelake, Siskiyou County, California (photo by Dorothea Lange, 1939).

Ella me parece invisible. Quizá sea esta virtud la que mejor defina a los grandes fotógrafos. Admiro la capacidad de Dorothea Lange para catalizar a partir de un rasgo, una mirada o un simple gesto toda la carga emotiva del instante, en ese clic pseudo-instantáneo admirable, y al mismo tiempo desaparecer, sencillamente no estar. Los ojos de sus retratados en mitad de una supervivencia la traspasan hasta llegar a nosotros, libres de obstáculos, para mostrarnos todo el dolor o la perplejidad ante la miseria encontrada.
Después de visitar Los años decisivos en el Museo Colecciones ICO (Calle Zorrilla, 3, MADRID) y disfrutar de algunas de las imágenes más recordadas del siglo XX (con la famosa Migrant Mother a la cabeza) me quedo entre todas, por icónica y definitoria, con la que encabeza este texto (Mother and Children...), conocida popularmente como Coca-Cola baby bottle. Significativa, porque en medio de la miseria siempre hay lugar para el contraste (un elemento con el que Lange juega a menudo). Agregar una tetina a una botella cualquiera nos parecerá extraño ahora a aquellos que flotamos confortablemente en ese colchón irreal llamado sociedad del bienestar, pero incluso hoy en día no lo es en absoluto en muchas partes del mundo, como tampoco lo era en aquellos Estados Unidos arrasados por la Gran Depresión. Sin embargo el significado puede cambiar si esa botella es de Coca-Cola, un simple detalle que dota a la imagen aséptica de toda una serie de connotaciones especiales. El hecho de que esa botella esté ahí puede ser más o menos casual, pero los grandes fotógrafos saben que es ese el preciso instante en el que deben disparar. Los ojos y las manos de Dorothea Lange, desde luego, no fallaron.
Aún estáis a tiempo para visitar Los años decisivos, una exposición que además es gratuita. El plazo se cumple el 26 de julio de 2009. No la dejéis pasar.

sábado, 18 de julio de 2009

Y DE POSTRE... LA VIDA RIMA

Un plato para paladares experimentados. Los grandes chef de La Vida Rima ofrecerán cocinados y emplatados algunos de los mejores ejercicios gastro-poéticos del presente milenio al público que acuda esta noche de sábado, 18 de julio de 2009, al restaurante La Barbacoa (Avenida de La Estación, 4, ZARZALEJO, MADRID).
Ellos son capaces de destruir, construir y deconstruir con sus propias manos todo lo que les pase por delante. Prepárense los Ferrán Adriá, Jamie Oliver o Alain Ducasse, porque los grandes chef de La Vida Rima no se lo van a poner fácil. No os perdáis este espectáculo lleno de poesía, música y estrellas Michelin en plena sierra madrileña.

viernes, 17 de julio de 2009

TE HE CONCEBIDO EN UN SUCIO LABERINTO AZUL


Qué es lo que temes.
He aquí que debieras arrastrarme a los despeñaderos del viento,
enseñarme a respirar en tu embocadura de brea,
mírame, mira
cómo nace el espasmo arrebatado por un acto de fe.
Mis dos mujeres pájaro han muerto sin límite,
por las noches sacudían las pendientes de vapor
que se empinaban madrugadas en el vicio.
Este era el paisaje que contemplas.
Por qué revuelves la voz sacudiendo las eses inseguras.
No nos cansemos de caminar mientras hablamos, relamiéndonos,
comprende ahora que nos exponemos ausentes al nuevo escenario océano.
La habitación duerme envuelta entre mis brazos.
Te he concebido en un sucio laberinto azul,
así que sea cierto que la luna pueda devolverte a tu agujero vestal,
justo antes de que los vecinos subterráneos esnifen el polvo del arcano.
Otro yo busca tu cara, no al-alm-a-mor que se encarama o algo así,
la pluma recogida por la mano monstruo en la que verdean las tormentas.
Escucharemos el bucólico obturador de las danzantes
mientras gélida se desliza la morfina en las braguetas.
Por qué no hemos huido antes de este mundo.
Por qué no lo hemos hundido.
Lo tendremos todo,
lo sabremos todo,
cuando al fin hallemos indistintos los dos lados de la jaula
lo sabremos.
Qué es entonces, dime,
lo que temes.

jueves, 16 de julio de 2009

VÍAS



Si una noche de invierno Calvino me llevara por senderos escuetos y mi historia cifrara libros apaisados en la luz. Si tu lengua donde abierto me derramo. Desprendiérame para holgar en el olvido. Vínculo de cuerpo brillante espera o bruñe incrédulo alabastro de membrana discreta,
cúrvate osamenta inquilina en la delación, como vida tu lengua, como esperma, turbamiento imborrable.
Si una noche un viajero mascullara en el frío, si el ambage desplazara un infinito aerolítico. Tren de nieve diletante llega del aire la tormenta. Si tu lengua. Si una tarde de julio un viajero recobrara para siempre el invierno. Desando inexorable en el espacio la inquietud del parto. Si tu lengua queda atrás. Cuando la repetición despierta una enésima sospecha.
Como un labio de papel toda la vida anáfora.


FANS OF POETRY: REFLEX-IONES 12


Está claro que llegará un día en el que una muchedumbre fanática y enfervorecida de seguidoras (y de seguidores también) se vuelva loca hasta entrar en trance místico ante el paso de su poeta favorito. Quizá era así hace siglos. En cuanto a nuestra edad contemporánea, podríamos decir que ese momento todavía no ha llegado. Lo que sí podemos encontrar es buena poesía. Como la que esta noche de jueves (16 de julio) se dará en la 12 edición del Reflex-iones Rock. Seis poetas seis se enfrentarán al público en el Restaurante Oeste Celeste (Calle Buenavista 18, Lavapiés, MADRID) a partir de las 21:00 horas. Atentos. Nuria Ruiz de Viñaspre, Ángela y Sol, Chicoria Sánchez, Alfonso López, Bolo y Sergio Cruz Placer os esperan. Be a fan of poetry. Ellos no regalan poemas.